domingo, 30 de enero de 2011

Valentín, obispo de los enamorados

            La tradición de celebrar el día de San Valentín tiene su origen en el año 270, época en que gobernaba Roma el emperador Claudio II. Para que los jóvenes soldados se dedicaran en cuerpo y alma al arte de la guerra, el emperador promulgó un edicto que prohibía contraer matrimonio. En contra de lo establecido, Valentín, un joven obispo romano, invitaba a las parejas a que acudieran a él para ser unidos en secreto. Su actitud desobediente llegó a oídos de Claudio, que ordenó decapitarle el 14 de febrero del 270. La historia asegura que, mientras permanecía en prisión a la espera de su ejecución, el obispo se enamoró de la hija ciega del carcelero Asterius. En su fe, Valentín devolvió milagrosamente la vista a la joven, y antes de su procesamiento le mostró el célebre mensaje de despedida: “De tu Valentín”. El suceso se hizo tan popular que en recuerdo de su muerte fue conmemorándose y sustituyendo a la fiesta romana del dios Lupercus, que se celebraba a mediados de febrero.
          El cuerpo de San Valentín se encuentra hoy día en la Basílica de San Valentín, en la ciudad italiana de Terni.

La cama de Procustes

En los tiempos del héroe griego Teseo, existía un bandido llamado Procrustes (otros lo llamaban Procusto) que solía asaltar el camino que unía Mégara con Atenas. En su cueva tenía dos lechos, uno corto y otro largo. A los viajeros que  pasaban por aquel lugar los retenía, los llevaba a la cueva y los obligaba a tenderse en uno de los lechos. A los que tenían talla alta los tumbaba en el lecho corto; para adaptarlos a la cama, les cortaba el trozo de pies que sobresalía. En cambio, a los que tenían baja estatura los echaba en el lecho largo; a éstos los estiraba violentamente para adaptarlos al tamaño de la cama. Así conseguiría personas de un tamaño ideal para sus camas, unas personas a su medida. Pero ninguno de los viajeros se adaptaba a sus exigencias y de una manera o de otra todos morían y no lograba tener un solo amigo.
 Un día, el héroe Teseo regresaba a Atenas cuando fue retenido por Procrustes e invitado a tumbarse en el lecho pequeño. Teseo se resistió y ambos se enzarzaron en una lucha en la que el bandido resultó muerto. La tranquilidad volvió a los caminantes que por el lugar pasaban.

Con frecuencia rechazamos a las personas que no son como nosotros queremos. Sólo nos fijamos en las apariencias, no indagamos en el interior de ellas. Así que despreciamos las oportunidades que nos da la vida para hacer nuevas amistades.

jueves, 27 de enero de 2011

Sadako Sasaki y las mil grullas


El 6 de agosto de 1945, Estados Unidos arrojó la bomba atómica en Hiroshima, Japón con la esperanza de terminar la Segunda Guerra Mundial. 
En pocos minutos, más de 200.000 personas perecieron por causa de la explosión.
Sadako Sasaki sólo tenía dos años de vida cuando la bomba cayó en su  ciudad. Era una niña feliz y energética y parecía que no le había afectado  la explosión de la bomba, pero nueve años después se le detectó leucemia, una enfermedad causada por la irradiación de la bomba.
Cuando estaba en el hospital una amiga suya le trajo una grulla de papel y le contó la historia de la grulla. Los japoneses creen que la grulla vive mil años. Si una persona enferma hace mil grullas de papel, los dioses le concederán
su deseo de mejorarse. Las grullas le aumentaron la esperanza a Sadako y entonces se puso a hacer grullas de papel con mucho entusiasmo. Sin embargo, lamentablemente ella falleció en octubre de 1955 después de haber hecho 644 grullas de papel. Los amigos y compañeros de Sadako continuaron su misión e hicieron el resto para completar las mil grullas. Con la esperanza de que se pudiera evitar la guerra en el futuro, los niños juntaron dinero para construir un monumento a Sadako y a las grullas. Ahora hay una estatua de una niña sosteniendo una grulla dorada en sus
brazos abiertos en el Parque de la Paz en Hiroshima.
Cada año gente de todo el mundo hace grullas de papel y las manda a Hiroshima. El 6 de agosto, Día de la Paz, los niños de la ciudad cuelgan las grullas en el monumento con la esperanza de transmitir este mensaje a todo el mundo:
”Este es nuestro llanto. Esta es nuestra oración. Paz en el mundo.”

martes, 25 de enero de 2011

Bienvenidos al nuevo blog del Departamento de Lengua y Cultura Clásicas del IES Salvador Serrano, de Alcaudete.